La flexibilidad de nuestra tecnología nos permite realizar instalaciones tanto de refrigeración en ambiente como forzada en cámara: cada una con características precisas y cada una con ventajas específicas.
Con estos sistemas es posible tratar cualquier tipo de producto.
La instalación garantiza un tratamiento de altísimo nivel y garantiza un elevado rendimiento.
La versatilidad de toda la estructura permite optimizar al máximo espacios incluso bastante reducidos sin por otro lado especiales limitaciones en lo que respecta a las productividades sostenibles.
Es ideal cuando hay que disminuir rápidamente la temperatura de un producto.
La instalación gestiona todo el proceso a través de un control preciso de cada parámetro.
Los alimentos se tratan cumpliendo las condiciones higiénicas más estrictas.